¿Es posible volver a empezar?

Una etapa termina y otra comienza. Entonces te preguntas ¿es posible volver a empezar en este momento de mi vida?

Sí. Es posible. Vuelve a soñar, a crear y a empezar. Si hoy ha terminado una etapa en tu vida significa que hay una nueva oportunidad de algo y para algo.

Este es uno de esos posts escritos con mi estilo muy personal, pero como en los demás artículos siempre hay sugerencias para que pongas en práctica y puedas llevar tu desarrollo personal a tus acciones.

 

 

A veces suceden pequeños “accidentes” en la vida, cambios profundos, cambios superficiales, pequeñas tormentas o inundaciones que hacen que te sientas con la única idea de querer salir, de respirar, de dejar algo atrás y volver a la vida.

Y puede sonar algo dramático, pero, algunas veces, este tipo de situaciones las podemos vivir en un trabajo que nos ahoga, en una situación que nos incomoda o simplemente en una etapa que ya está más que terminada y lo único que te dice tu corazón a gritos es:

 

¡Es hora de salir, de respirar, de vivir! No de sobrevivir, ¡DE VIVIR!

 

¿Y qué es vivir?, podríamos compartir muchas definiciones de vida pues cada uno tiene su propia explicación. Lo que sí podríamos tener en común alrededor del SIGNIFICADO DE VIVIR, es que es aquello que nos hace vibrar, que nos hace levantarnos con ilusión, querer desayunar con una gran sonrisa, decir “buenos días” con la mejor parte de tu alma e ir cantando mientras cierras la puerta de casa para comenzar el día.

 

Vivir es tener esperanza, es disfrutar de lo que estás haciendo, es descubrir aquello con lo que sonríe tu corazón, sea desde elaborar una manualidad, hacer cuentas bancarias, cantar o arreglar un carro/coche, hasta diseñar un proyecto, servir a alguien, ser atleta, construir un juguete o una casa. No importa “el qué” (desde que no hagas daño a alguien o a ti), lo que importa es que disfrutas tanto tantooooooo que eres feliz justo en ese momento en el que lo realizas.

 

Un nuevo comienzo para la esperanza

 

Así que ahora que pienso en los cambios, en esos puntos en los que la dirección de tu vida cambia o puede cambiar, lo único que puedo sentir es ILUSIÓN, ESPERANZA de volver a soñar, de volver a crear, de volver a tomar una página en blanco de mi vida y pensar qué es lo que realmente quiero escribir.

Y escribo esto desde mi habitación en Medellín, Colombia -donde acabo de llegar para pasar dos semanas con mi familia-, porque justo ahora se ha terminado una etapa de mi vida laboral y comienzo un nuevo período. Aún no tengo claro los pasos que voy a dar, pero tengo claro que necesitaba espacio, aire y mucho amor para poder volver a preguntarme:

 

¿Qué quieres ser cuando seas mayor?

 

Y me encanta esto. Algunos lo llamarán “irresponsabilidad”, yo lo llamo “aventura”, el poder tomar una caja de colores y volverte a plantear POSIBILIDADESSSSSS.

LAS POSIBILIDADES SON:

REGALOS

NUEVOS CAMINOS

NUEVAS PREGUNTAS

NUEVAS RESPUESTAS

LIBERTAD

ESPACIO PARA PENSAR

ESPACIO PARA ACTUAR

SUBIR A LA TERRAZA DE UN EDIFICIO Y MIRAR EL PANORAMA DE OTRA MANERA

NUEVAS MANERAS DE CAMINAR

NUEVAS MANERA PARA VOLVER A EMPEZAR

¿QUÉ SON PARA TI LAS POSIBILIDADES?

Las posibilidades nacen en la esquina de mi casa, al final del puente que hay en tu ciudad, en un programa de televisión, en una ruptura, en una despedida, en el cielo, en un árbol, en un abrazo, en un proyecto que no ha salido adelante, en un momento intenso, las posibilidades nacen en tantos lugares y circunstancias. Solo necesitan que las veas de manera diferente. Necesitan que las veas… para volver a empezar.

 

Si hoy te preguntaras nuevamente: ¿Qué quieres ser cuando seas mayor?…

 

¿Qué responderías?

Y da igual si tienes 15, 30, 50 o 70 años…

¿QUÉ QUIERES SER CUANDO SEAS MAYOR?, ¿QUÉ QUERÍAS SER DE MAYOR CUANDO APENAS ERAS UN NIÑO, UNA NIÑA?

 

¿QUIÉN QUIERES SER HOY?,  ¿QUÉ QUIERES SER HOY?

 

La primera respuesta la tengo clara:

Quiero ser FELIZ, estar rodeada de gente que amo y me ama, quiero ejercer como coach y motivadora y quiero seguir siendo una APRENDIZ DE LA VIDA.

Los errores están ahí, las lecciones están ahí, la experiencia está ahí y podré seguir cometiendo otras equivocaciones (espero que sean nuevas y que las antiguas ya las tenga aprendidas), pero tengo muy claro que…

 

DE MAYOR QUIERO SER FELIZ.

 

Y tú?