Entre la ilusión, la procrastinación y el miedo.

Wow ¡Cuánto puedes tardar en comenzar algo! Lo he vivido en varias ocasiones y hoy quiero compartir contigo cómo he gestionado el miedo para dejarlo atrás, y comenzar a hacer lo que quiero, debo y puedo.

¿Te surge algo en el camino cada vez que vas a comenzar tu proyecto?

He estado comenzando mi blog tuhistoriapersonal.com desde hace mesessss, pero siempre había surgido algo en el camino: no tengo tiempo, ahora tengo otras prioridades, aún no sé la estructura del blog, debo desarrollarlo con calma, y, ¿el logo?, etc. Pero en el fondo, tras cada una de estas explicaciones estaba el miedo. Sí, el miedo, esa figura -muchas veces imaginaria y otras veces real- que aparece en nuestras vidas para anunciarnos algo, prevenirnos de algo o que, simplemente, aparece en la puerta de casa para ponerte zancadilla y llenarte la cabeza de interrogantes, puntos suspensivos, preocupaciones o de historias del futuro que aún NO EXISTEN y que quizá NUNCA VAN A EXISTIR.

Y tras volverme un poco «loca», decidí sentarme con esa figurilla. Decidí sentarme con mi miedo (las emociones son mensajeros y es bueno saber qué nos dicen), para mirarlo directamente a los ojos y preguntarle:

Miedo, ¿qué estás haciendo acá, conmigo?

No os voy a contar toda la conversación, tardaríamos un buen rato. Lo que sí voy a hacer es transmitiros lo que aprendí de esta experiencia.

Los encuentros con nuestras emociones pueden ser enriquecedores

(Abro un paréntesis para decirte: sí, estoy hablando del miedo de abrir un blog y una web, que es el miedo a ser rechazados o aceptados, el miedo al «qué dirán». Un miedo que aparece en muchas facetas de nuestras vidas cuando vamos a iniciar un proyecto, a cruzar el océano, a dejar atrás tu país o tu trabajo, o a regresar a tu país o a tu empresa. Sí, es ese miedo. Estoy hablando de ese miedo que aparece enmascarado de muchas maneras en algunos momentos).

Ahora puedo seguir con lo que te estaba contando, la importancia de comunicarnos con nosotros mismos y con nuestras emociones para identificar el «para qué».

¿Para qué?

Una mujer dando un paso en el mar. Deja atrás el miedo y comienza ahora.

Estos son los pasos que empleé para comunicarme con mi miedo. Tú también lo puedes hacer. Te sorprenderán las respuestas.

Pasos para encontrarte con tu miedo, hablar con él y, finalmente, despedirte con felicidad y tranquilidad.

 

Detéctalo

 

Identifica y confirma que, en efecto, sientes miedo en ese momento.

 

Acepta

 

Acepta que está ahí, no lo escondas. Por más que trates de ponerlo en tu armario, de encerrarlo con llave en un baúl o de ignorarlo, esa figura llamada “miedo” está ahí hasta que decidas hacer algo. Todos, todos los seres humanos hemos sentido miedo varias veces en nuestras vidas.

Pregúntate, ¿qué hay detrás de ese miedo? Acércate a esa particular figura, dale forma a tu miedo, pregúntale para qué está ahí. ¿Te está diciendo que no estás preparado?, ¿que no te lo mereces?, ¿te está diciendo que vas a fallar?

 

Agradécele

 

Agradécele la información que te está dando.

En el momento en que escuches a esa figurilla del miedo y tomes el mensaje que te está enviando, ya habrá cumplido su misión de avisarte y se retirará o se transformará.

Algunas personas sugieren darle una patada al miedo para sacarlo rápido de sus vidas. Otros aconsejan transformarlo, y alguna amiga mía ha decidido pedirle al miedo que se retire cuando ya ha cumplido su misión de entregar el mensaje. Yo prefiero esta última opción. (Gracias Montse Pujada).

Así que al decir gracias y entender el mensaje, el miedo se retira y da paso a una emoción diferente.

 

Trabaja con la información

 

Después de agradecerle al miedo lo que realmente te está diciendo, ¿qué sigue? Toma la información y trabaja con ella.

¿Te dice que no estás preparado?

¿Qué necesitas si se trata de esto? Prepararte, informarte, aprender, crecer.

¿Te dice que vas a fallar?

¿Qué necesitas si se trata de esto? Quizá necesitas tener la certeza de que sólo lo sabrás si lo intentas.  Probablemente falles o probablemente no. Pero para ello debes hacerlo, no imaginarlo.

¿Te falta valor?

¿Qué necesitas si se trata de esto? Piensa. ¿Te sientes inseguro?, ¿por qué?, ¿qué hay detrás de esto?

¿Te dice que no eres suficiente?

¿Qué tienen otros que tú no tengas o no puedas conseguir?, ¿son expertos? Algún día no sabían nada, así que se prepararon. ¿Tienen muchos años de experiencia? Para ello han necesitado estar practicando y practicandoooooo.

¿Tu miedo te dice que no te lo mereces, que no mereces sacar tus proyectos adelante?

Revisa lo que piensas de ti, tus prioridades, tu amor por ti y por tus proyectos y recuerda que te mereces lo mejor, nos merecemos lo mejor. Pregúntate y responde las razones por las cuales SÍ te lo mereces.

 

Preparara tu plan

 

Después de este importante “diálogo” con el miedo pasas a la acción. Es decir, pasas a informarte, prepararte y hacer un plan que te permita reforzar aquello que descubriste y trabajar en cada una de las áreas.

 

Confianza

 

Ahora, espera lo mejorrrrrrrrr.

Si sucede lo mejor, celébralo, y si no, simplemente revisa lo que aprendiste.  Y ¿por qué no? También celébralo. Celebra lo que has aprendido, celebra que hoy sabes otras maneras de fallar para no repetirlas. ¿Qué puedes mejorar? ¿qué puedes cambiar? Cuando respondas esto, lo que has vivido ya no será un fallo o como muchos llaman: un fracaso. Será una EXPERIENCIA.

Y todo esto es para decirte que sí, que reconozco que esa figurilla -llamada miedo- estaba presente en mi proyecto de blog. Sé que algunos amigos y, por supuesto, mis familiares me apoyarán, pero, ¿qué pensarán los demás?, ¿los compañeros de trabajo?, ¿mis jefes?, ¿Será correcto iniciar mi blog ahora o no? Y, ¿sabes qué? Llegué a la conclusión de que mi corazón quiere tener este blog desde hace muchoooo tiempo, que a él (a mi corazón) y a mi (todita, toda y en general) NOS APETECE COMPARTIR CONTIGO cosas que hemos aprendido y que aligeran nuestra vida.

 

Así que todo es EMPEZAR. Este es el comienzo de Tu Historia Personal.

 

Una mujer caminando en un parque hacia el sol, comenzando un camino.

 

Anímate a dar el primer paso para comenzar tu proyecto, sea grande o pequeño. ¿Qué necesitas para hacerlo? Comienza con la primera acción que te lleve a ponerlo en marcha.

Pienso que no llegará el mejor momento porque siempre estarás esperando que todo sea perfecto (Catalina, por favor, escucha esto para otros proyectos). Pero ese momento perfecto no existe como tal. Existe la perfección de este momento. Sí, este, justo el que estás viviendo ahora. Este es el momento. Toma tus herramientas, adquiere las que necesitas y comienza a dar pasos (pasos con propósito).

COMIENZA HOY TU HISTORIA PERSONAL.